Si bien intuitivamente parece natural que un grupo de personas en estrecha colaboración pueden llegar a generar mejores ideas que un solo individuo, sólo en los últimos años se han realizado experimentos donde esto se ha medido científicamente.

Los resultados efectivamente muestran una mejor capacidad para resolver problemas por grupos que por individuos aislados.

También en estos experimentos se puede analizar el rol que juega cada participante en su entorno, su comportamiento social y su aportación a la generación de ideas y soluciones.

Los experimentos realizados inicialmente han sido presenciales y con un número bajo de individuos (entre 4 y 6 personas por grupo), pues en general la interacción directa de un elevado número de personas puede generar más ruido que soluciones, siendo este un problema importante, que se manifiesta en las reuniones amplias con opiniones abiertas, las Redes Sociales, o entornos online.

Sin embargo, en entornos con número bajo de personas se ha constatado efectivamente que la interacción mejora el rendimiento del grupo, y que además dicha interacción da importante información acerca del comportamiento grupal de cada individuo.

Nuestra empresa ha desarrollado, en colaboración con investigadores de la Universidad de Zaragoza, una herramienta que amplía estos experimentos a grupos de tamaño arbitrario, hasta varios miles de personas, manteniendo las ventajas de los grupos pequeños: generación de mejores ideas, monitorización y análisis del comportamiento colaborativo y social de los participantes.

Esto supone un gran avance; por un lado, permite que cientos o miles de personas colaboren de manera ordenada para obtener mejores soluciones, aumentado la potencia intelectual del conjunto frente al individuo aislado. Por otro permite conocer el comportamiento individual, el rol social de cada persona, su comportamiento colaborativo y por tanto su relevancia dentro del conjunto.

La herramienta se utiliza a través de una plataforma web, y cualquier cliente puede crear sus propios proyectos, definir las preguntas o retos, configurar los tiempos, fases, etc. Además, la herramienta muestra en tiempo real como evoluciona el experimento, las ideas que se van generando, los usuarios destacados, comunidades de ideas, estrategias, etc. para conocer a fondo la dinámica social del grupo en consideración.

La aplicación de Inteligencia Colectiva de Kampal es de gran utilidad en diferentes entornos, pero incidiremos aquí en tres de ellos

Educativo: Resolución de problemas y cuestiones. Ayuda a visualizar la forma de resolver por parte del resto de compañeros, y a dilucidar entre respuestas verdaderas y falsas. También pueden ponerse en marcha proyectos para comprender la visión de los alumnos sobre temas como el acoso escolar, la igualdad de género, etc., y que puedan aprender a dilucidar los comportamientos correctos e incorrectos.

Empresarial: Para la generación de soluciones técnicas por equipos de expertos en el tema; la discusión organizada y monitorizada genera soluciones más sólidas y eficientes. Además, permite el conocimiento de los perfiles profesionales y personales de los participantes.

Social: Las discusiones en Internet, Redes Sociales… sobre temas candentes de política, economía, etc. son en general insustanciales por el ruido y la falta de control sobre las mismas. Nuestra herramienta permite una discusión masiva de estos temas, de forma ordenada y logrando una solución final que responde al consenso natural generado en el conjunto de participantes.